martes, 7 de enero de 2014

El finissimo Rey Mago

el finissimo comentario


No estoy de acuerdo en que a los hijos se les mienta con la existencia de 3 seres mágicos solo porque es una tradición.

Es cierto que no tengo hijos, pero si esa situación cambiara no creo que cambie mi postura de no mentirles a mis hijos. No quiero acusar desmesuradamente a los padres de hoy, entiendo su intención por tenerlos en un mundo de fantasía. Aunque no creo que los niños dejen de disfrutar el "jugar" con cuestiones fantásticas solo porque no se les educo para creer en seres místicos.

El barco pirata, superhéroes, caballeros medievales, astronautas en marte; los niños tienen un mundo de fantasía en sus cabezas que me parece deben ser educados para mantenerlo ahí, en una fantasía, y que aprendan a delimitar hasta donde puede ser real, porque gran parte de la fantasía se puede volver real, ¿cómo?, con el esfuerzo, con trabajo, con echarle ganas.

Porque si no, después terminan creyendo que los seres que convierten el agua en vino, caminan sobre el agua y curan a los enfermos, son reales... pero bueno, no me meteré en esos asuntos tan específicos.

Lo que quiero decirles es que me parece mejor enseñarles a los niños que cuestiones como, Los Reyes Magos, el Ratón de los Dientes, Santa Claus, etc., son tradiciones que se pueden seguir llevando acabo. Digo, sería muy injusto dejar a un niño sin juguete en pleno 6 de Enero.

Me parece que se les tiene que consientizar de que esta cuestión es totalmente fantástica, que se celebra por tradición, no existe magia en el suceso, si no, de cualquier manera al final de ciertos años se enteran de la verdad y se darán cuenta de que sus padres son unos mentirosos... y quien sabe,  quien sabe cuánto tiempo pasara para que se den cuenta que la mentira fue con buena intención de ellos, para que tuvieran cierta fantasía en sus vidas. Cuando la vida de los niños esta llenas de historias fantásticas.

Además esto puede servir para darles conciencia de la situación económica de la familia, estando el niño más inmiscuido en estas decisiones, se sentirá más importante, entenderá que tal vez no todos los años pueden ser buenos en cuestión de regalos, y aprender otros valores. El que lo sepan no quiere decir que se divertirán menos con los regalos que les toquen, si lo piensan, es más importante para ellos el bien, que de donde llego esté.

No creo que sea justificable mentirle a un niño solo por una tradición, si desde temprana edad se les enseña a separar la realidad de la fantasía, podrán aprender a tomar mejores decisiones. Sí se les enseña que los milagros existen pero no como cuestión de la casualidad, aprenderán a ser honrrados y justos.

Ustedes son libres para decir cómo educar a sus hijos, (claro, dentro de unos márgenes legales)… en lo particular no me gusta que me mientan, por lo tanto prefiero no mentir a los demás, aunque sean niños… Bueno, salvo que la situación en cuestión les pueda causar algún trauma… entonces si mientan.


CSR




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